Actualidad. A vueltas con la Ley de Montes

Hace una semana publicamos la posición de la FEDME (Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada) sobre la nueva ley de Montes.
La liebre se levanto después de que el diario El País publicara este artículo, donde daba a conocer las conversaciones con la Real Federación Española de Caza y la intención del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA para los amigos) de dar prioridad los días de cacería en montes públicos a este colectivo, con la consiguiente prohibición de paso para el resto de ciudadanos que quisieran usar ese espacio público.

El sector de la caza ha ganado poder

“Queremos que todas las actividades sean compatibles y en este caso eso quiere decir que cuando se lleva a cabo una, no se haga la otra”, señala el presidente de la Real Federación Española de Caza 

Estas palabras, constituyen un argumento sin sentido, en el que la fuerza de las armas y el intento generalizado de sacar un rendimiento económico a los montes públicos, esta empujando decisiones legislativas y operaciones a gran escala con el patrimonio de todos los españoles.

Visto en perspectiva, primero fue el intento de venta de montes de utilidad pública en Castilla - La Mancha (Junta de Castilla La Mancha), eliminar el estatus de reservas de caza de varias de estas fincas, incluir las futuras ganancias de la venta en los presupuestos de la comunidad autónoma, etc. Mas tarde, se han moldeado la ley de tráfico, para que en los accidentes con animales de caza en libertad, la responsabilidad recaiga generalmente en el conductor ,salvo que el accidente se haya producido por acciones directas de la caza o por falta de reparación del vallado y mala señalización; o permitido en alguna comunidad autónoma (Castilla La Mancha otra vez) variedades de caza como el lanceo de jabalí a caballo, mas propia del siglo XV que del que vivimos, aunque de moda en la actualidad por lo que se ve. De momento, los últimos casos son la puesta en venta de una finca emblemática en Andalucía (MAGRAMA) o la venta del castillo de Maqueda (en otro orden de cosas).

Esta desamortización de bienes públicos, supone un rendimiento económico momentáneo, que no solucionará la crisis en la que vivimos y a la larga como el resto de desamortizaciones realizadas en España, solo nos empobrecerá, al perder valiosos recursos naturales y públicos.

Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, el gran incomprendido.

MAGRAMA, ha realizado un comunicado "aclaratorio" en el cual termina diciendo:

"En todo caso, y ante las diferentes informaciones aparecidas, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente reitera que ninguno de esos borradores contempla en ningún momento prohibición o restricción alguna al tránsito de las personas por los caminos públicos, ni en día de montería."

¿Debemos entender entonces que las conversaciones que la Federación de Caza dice mantener son falsas? Algo no cuadra y alguien no esta diciendo toda la verdad.
Lo malo de estas cosas es que la gente esta ya cansada y se cree poco lo que señores con corbata dicen en la televisión y las firmas que se recogían en Change.org para solicitar a MAGRAMA que se replantease el asunto, han pasado las 90.000. Tu puedes firmar aqui.

Donde terminaremos

Lo que seria verdaderamente determinante, es que estos montes públicos fueran espacios libres de caza, reservas de fauna.Que el control de poblaciones fuera exclusivo y justificado por Agentes de Medio Ambiente, y realizado de una manera segura, equilibrada y ecológica.

Quizas así podríamos evitar cosas como las vividas en Monfragüe recientemente (ponemos el reportaje bastante amarillo y sensacionalista que grabo La Sexta y que no ayuda a comprender 100% el problema) y que fue un claro perjuicio económico para muchas personas que viven de la explotación turística. Así las cosas, por más de 600 € por puesto de caza y  sueldos en negro para otros pocos (que también los pobres somos culpables), es la caza un sector económico "rentable".

Entrada al Monte de Utilidad Pública , Dehesa Boyal, de La Calzada de Oropesa