Ruta en el rio Gualija, El Puente del Buho

Buenas arañuelos

Con motivo del día del Geoparque de las Villuercas Ibores Jara, vamos a dedica una ruta a este paraje tan próximo a nosotros y justo en el limite entre Bohonal de Ibor y Peraleda de San Roman.

El rio Gualija es de esos afluentes del Tajo que no nos enseñan en el colegio, que alguno podríamos llamar arroyo pero que en esta lluviosa primavera nos depara un espectáculo digno de los ríos mas salvajes del mundo.
Nace en el corazón de la sierra de Altamira, en plena comarca de la Jara, y cruza al oeste de esta para acabar por un profundo valle en su desembocadura en el Tajo, hoy, en su entrada al embalse de Valdecañas.
Y hasta aquí nos dirigimos para buscar la antigua cañada de San Roman, a su paso por el puente del Buho y a un cercano molino que aun perdura en muy buenas condiciones.
La ruta sera todo el tiempo campo a traves, por lo que debemos llevar calzado y ropa adecuados.

Ruta Rio Gualija
Tipo: Circular
Km: 4 km
Dificultad: Baja, algo de desnivel pero poco.
Medio: Campo a traves todo el recorrido
Inicio/Fin: Carretera EX-387
Observaciones: Sin fuentes, evitar horas centrales en días de mucho calor, calzado y ropa adecuados para transitar fuera de pista, hay que pasar varias alambres.

Esta ruta sigue el cauce del rio Gualija desde la carretera que une las localidades de Bohonal y Peraleda de San Roman, hasta la desembocadura de este en el Tajo. Aquí, en un apartadero de la carretera en lo profundo del valle podemos aparcar e iniciar la ruta.

La ruta en si es fácil, consiste recorrer el cauce del río, teniendo como mayor obstáculo la falta de camino y tener que hacerlo campo a través por la vegetación, de monte bajo con alguna encina, que en esta lluviosa primavera esta mas alta que nunca. Así en ocasiones nos acercamos o alejamos al río, en función de la comodidad del terreno.

Y son estos momentos de acercarnos la rivera y meternos en sus aguas, los que nos descubren una sorpresa,típica de estas fechas para escarnio nuestro, la remontada de los barbos.

Ya nos habíamos encontrado barbos antes en el arroyo de Naciados en El Gordo, pero no esperabamos semejante concentración, ni tan alejada del embalse, ya que estan varios kms aguas arriba. Miles, literalmente, durante kms, compitiendo por cada espacio en el lecho de grava del Gualija, en el que construir un nido y dejar sus huevos.

Continuamos aguas abajo y cruzando un par de alambradas, llegamos a una portera, que como siempre dejamos como nos encontramos, para continuar los únicos 100 metros de pista en todo el día. Esta nos lleva directamente al puente del Buho y paso de la antigua cañada de San Roman que cruzaba el Tajo por otro puente ya desaparecido.

Como veis en la fotografía, el rió va bastante alto, ya que este lugar tiene algunos metros de profundidad por lo que hemos podido saber.

El siguiente punto de la ruta es el molino, que situado aguas arriba, hemos dejado para nuestro camino de
vuelta. Este consta del edificio principal, en bastante buen estado y conservando aun sus piedras soleras donde se molía. Como veis, la zona es toda una postal en esta corta pero intensa primavera.

El único pero es que el rió esta alto, y como era común antes y hoy ocurre en nuestra visita, el espacio interior esta inundado y embarrado, pero lo normal es poder entrar con facilidad y ver parte del sistema hidráulico que hacia funcionar el molino.

También conserva en muy buen estado su azud, azuda o zua, que era la represa para almacenar y desviar el agua por unos canales hacia las diferentes piedras de moler que tenia en su interior, garantizando así una mayor temporada en la actividad harinera.

Y es justo aquí, en la apertura del azud, donde nos llevamos la sorpresa del día, al ver por donde habían tenido que pasar los miles de barbos que hemos visto durante estos dos km. Indiferentes a nuestra presencia, obstinados siguiendo su instinto, en un espectáculo digno de cualquier documental, a tan solo 20 km de casa.

Estas imágenes son prueba viva de la diversidad y riqueza de nuestros ríos, a pesar de las amenazas que sobre ellos cernimos. Y es que esta remontada del Gualija, como la del arroyo de Naciados y tantos otros, puede convertirse de forma casi inexorable, en un mero testimonio gráfico.

 Decimos esto por la aparición en las aguas del embalse de Valdecañas y del Tajo del siluro, especie invasora que ya ha extinguido al barbo y otras especies autóctonas en el río Ebro y que aquí, puede llevar el mismo camino en unos años. Por eso os animamos y descubrimos estos pequeños lugares escondidos, tan arañuelos, tan nuestros, para que los disfrutéis vosotros mismos en directo.

Y como siempre amigos podéis ver todas las fotos de la ruta en nuestra pagina de Facebook y descargar el track para GPS o movil en wikiloc.com

Esperamos que haberos mostrado este rinconcito, frontera del arañuelo y del Geoparque de las Villuercas, os anime a visitar la zona, de donde sin duda podéis encontrar mas información en www.geoparquevilluercas.es

Nosotros esperamos haber cumplido con nuestra parte de historia, naturaleza y deporte, ahora os toca a vosotros disfrutarlo